16 de mayo de 2014

Alfredo Calonge 1961-2014








Nos ha dejado Alfredo Calonge




Su Lambretta


Hace muy poco, Los Negativos sacaban un nuevo single. Cuando escuché la canción "A Tumba Abierta", automáticamente sufrí una regresión a otro tiempo y, todo hay que decirlo, otra ciudad. 

Barcelona ya no es en absoluto la ciudad que era en aquellos días. Han desaparecido los bares, las calles han cambiado, la ciudad es un gran escaparate que sueña con los euros que puedan gastar los turistas, y ahora que no está Alfredo ya es imposible que nada vuelva a ser igual. 

Los que éramos jóvenes en los 80, recordamos el ambiente que se respiraba en la ciudad. La dictadura había pasado, los grises eran marrones, la política no nos interesaba, para muchos la mayor preocupación era el ineludible deber del servicio militar, eso si no tenías suerte de ser excedente de cupo o tener más dioptrías que Mortadelo (la objeción de conciencia se consideraba delito de deserción). Y comenzaron a aparecer por la ciudad gente que iba un poco a contracorriente. No les gustaban las discotecas, y mucho menos aquellos grupos que sonaban en exclusiva por la radio. Unos llevaban el pelo largo y cazadoras de cuero, otros el pelo pintado y pantalones raídos, otros llevaban largos tupés y botas de punta. Lo llamaron tribus urbanas. 

Una tribu (nunca me ha gustado este nombre, pero al final se ha quedado) era un poco diferente. Les gustaba vestir bien, les gustaban las Vespas y Lambrettas, gastaban su dinero en discos de unos grupos llamados The Who o The Jam, y tenían una película fetiche, Quadrophenia, a raíz del estreno de la cual podríamos decir que comenzó todo. Son los Mod.

Las Mod, como todos los demás, estaban ligados a una estética y unos gustos musicales. En Barcelona tuvimos la suerte de tener una buena cantidad de ellos, comenzando por el grupo de los hermanos Gil, Brighton 64 (y como dice la canción de Los Negativos, "envidié la ropa Carnaby de los hermanos Gil", ya que ellos eran los que considerábamos más auténticos con su ropa traída de Londres, mientras los demás reciclábamos trajes de nuestros padres y chaquetones militares de los Encantes), Los Canguros, con el incombustible Felipe y su canción "Cinco Años", Telegrama, Kamembert y Los Negativos. Y otros personajes como Ringo Julián, Felipe Muñiz, etc. No nos olvidemos de los fanzines, a base de fotocopias, tijeras y barras de pegamento, que eran nuestro Google de la época

En 1986, su disco Picnic Caleidoscópico me obsesionó, no paraba de ponerlo en un viejo tocadiscos de maleta, al que le ajustaba el brazo a base de colocar encima de la aguja monedas de 25 pesetas. Su canción Moscas y Arañas no paraba de ponerla. Un disco que demostró el talento del grupo.  

Ahora nos ha dejado Alfredo, músico, coleccionista y gran persona, y la ciudad ya no volverá a ser igual. Gracias Alfredo.